Facundo Balbi

Critiques de romans Hoy vamos a reseñar la novela “Tres luces” de Claire Keegan, en comparativa con otra de sus novelas llamada: “Cosas pequeñas como esas”. Primero hablemos un poco sobre la autora, Claire Keegan. Claire, que tiene una habilidad excepcional para explorar la complejidad de las relaciones humanas y las dinámicas familiares, nos brinda dos obras espléndidas que capturan la esencia de cómo se vive en Irlanda desde diferentes perspectivas. "Tres luces" y "Cosas pequeñas como esas" no solo comparten un origen común en la autora, sino que también nos muestra su facilidad para hacer historias con una profundidad emocional que retumba en el corazón del lector. En "Tres luces", Keegan nos adentra en un entorno rural en donde una madre viuda debe enfrentar la inesperada muerte de su esposo y la dura realidad de criar a dos hijos pequeños en pésimas circunstancias económicas. La narrativa se centra en las decisiones difíciles que la protagonista debe ...

Por allá en el 2017, sucede lo que yo llamo la historia prohibida de mi vida. Aquella historia la cual yo se que estuve mal, pero a la vez no se que tan mal estuve, se las voy a contar. Esta historia sucede en época de colegio, estaba en 3ero año, tenía tan solo 15 años. Y me gustaba mucho una chica de mi mismo curso, precisamente la chica que estaba sentada detrás mío. Mi amigo Lauti con el cual me sentaba, me incentivaba a que le hable y yo luego de un tiempo, accedí. Hablamos todos los días, pasado unos días empezamos a hablar mucho más seguido por Whatsapp. Todo avanzó más que bien, le agradecí mucho a Lauti en su momento, porque sino me hubiese jodido para que le hable, no sé si lo hubiese hecho.  Hasta que ocurrió lo inesperado, según me contó él, en un momento de calentura estuvo con Sol, la chica con la cuál yo venía hablando y viéndome hace un tiempo. Ambos me pidieron perdón. Obviamente no las acepté y me enojé mucho, más que nada con Lautaro, me sentí completamente traic...

  Querido Jorge, Quería comentarle que estoy ansiosa por hablar con usted alguno de estos días. Sería de mi agrado que aceptes esta invitación para salir a tomar un café a solas, en la confitería frente a la plaza Castelli. Estuve pensándolo bien y me di cuenta que sos la persona indicada para ayudarme. Mi idea es realizar un proyecto juntos, el cual trata de vender órganos y huesos humanos.  Tu labor sería secuestrar a las víctimas en cuestión y traerlas a mi hogar, lejos de la ciudad. Para así poder deshuesarlas sin ningún tipo de peligro alguno, pero quedate tranquilo que de eso me encargo yo, tengo experiencia en la materia. Respondeme cuando puedas y comentame que te parece, cuando nos sentemos a tomar el café, te lo explico todo bien detallado para que no quede ninguna duda. Abrazo grande! Belle Gunness